Crónica de la salida del 27 de Septiembre 2012

Salí por la mañana con la intención de soltar piernas y hacer una hora y media de reposo activo en el circuito de San Felipe. Me encontraba cansado, pues últimamente no duermo demasiado y descanso poco, por lo que entendía que podía o debía de hacer  un pequeño reposo activo.
Al llegar a San Felipe, vi a tres ciclistas que iban realmente tranquilos y sin pensarlo dos veces dije de unirme al trío y hacer un cuarteto....... de "hombres tranquilos", (ya estabais pensando mal....os conozco), Una vez con ellos y tras las presentaciones de rigor e incorporado a la grupeta,  Chus, Jose, Rivero y el Abuelito me dispuse a dar vueltas al circuito en plan trotón dominguero, pero no se bien como, me encontré dando un si a la pregunta: si me unía a ellos para ir a Guía, seguramente porque pensé que iríamos a ese ritmo que tanto me gusta, ....al golpito, al tran tran, ya sabéis, a ese ritmo que una pierna le pide permiso a la otra pa´ menearse. ¡ay que bonito es ese ritmo!.
  Entramos en la subida del puente de Silva y .....¿que pasa?, ¿que pasa?.....¿donde esta el ritmo troton, ese que me gusta a mi? ....¡se acabó! pues parece que quieren subir mas alegres...... no saben lo que se pierden estos chicos, pero gracias a Dios esta cuesta se termina pronto y hasta Guía es bajada.
 Astutamente, no saco la cabeza y me quedo con Rivero (que el pobre estaba saliendo de un resfriado) y aunque subía a buen ritmo, cedía unos metros con Chus y Jose, y yo jugaba con estar cerca de Rivero y ceder ante Chus y Jose.
 Llegando a la cima del puente de Silva, pensaba en lo diferente que somos las Grupetas, a unas les gusta darse algunos "palitos", y a otras como la nuestra, hubiéramos subidos formando un solido paquete.
 En la bajada, cogí rueda de Rivero y éste forzó la marcha hasta unirse poco mas tarde con los otros dos compañeros que marchaba esperando que cogiéramos rueda para volver a formar grupeta y dirigirnos ante mi sorpresa a Sardina del Norte.

El abuelito con sus nuevos compañeros Chus,  y Rivero

El Abuelito con Chus y Jose

Y una vez emprendido el camino de vuelta, se decide subir el Albercon de la Virgen y seguir hasta Moya.

¡Hostia! con el reposo activo que iba a hacer..... ¡bueno! que no cunda el pánico ...., despacito y nada de cambios de ritmo, intentaremos llevar un ritmo cómodo y estable.

Al poco tiempo de empezar a subir, cojo la rueda de Rivero no sin antes advertirle y pedirle permiso para "chuparle la rueda" todo lo que pudiera y el se dejara. Rivero amablemente me dijo que chupara todo lo que quisiera..... (creo que no iba el tema con segundas......bueno espero) y la verdad es que no tuve tampoco que darle explicaciones de mi escaso rendimiento de la salida, él no se encontraba tampoco en su mejor momento físico, pues el resfriado todavía lo tenia bien cogido.

Casi toda la subida fue realizada de la misma forma, Jose y Chus, o Chus y Jose a 20 o 80 mts delante de nosotros .

Después de meternos en las rampas que nos llevan a Moya, veo que me he quedado sin agua después de tomarme un gel de carbohidratos para no perder el tono energético. Chus y Jose se quedaron esperándonos a la entrada a Moya a mi y a Rivero que "entramos en Moya en un disputado Sprint"

Sprint de entrada a Moya, Rivero levanta la mano después de imponer su punta de velocidad ante el Abuelito que con cara de dolor se resigna ante la derrota de este sprint especial.

Una vez cargados de agua nos dirigimos a la bajada por Pagador y después a llanear por el circuito con dirección a Las Palmas, donde el Abuelito cada vez que se cruzaba con algún ciclista le invitaba a unirse a la grupeta de regreso a Las Palmas.

Al llegar a la interminable, Chus marca un ritmo a 25 Km hora que rompe a la grupeta y aunque el abuelito le pide que no siga con este ritmo, pues terminaría por no dejar que los integrantes vuelvan a entrar en la grupeta , Chus baja ligeramente el ritmo, y se hace muy difícil para la grupeta poder acercase a estos.

El abuelito viendo el hueco importante que se ha hecho, baja radicalmente el ritmo y se descuelga de Chus, hasta que poco tiempo mas tarde, como un obús aparece Jose que me arranca literalmente las pegatinas de mi bici  y se larga a por Chus.¡Como les gusta a estos chicos darse un poco de cuero!,........¡ pero eso si! con buen rollito. Cuando Rivero llega a mi altura, estamos en la parte mas dura de la famosa cuesta de la Interminable, y la ventaja que nuestros compañeros nos llevan es ya bastante importante. Avivamos el ritmo y terminamos con buenas energías y nos lanzamos a relevos hasta Las Palmas con la esperanza de poder contactar con los "fugados", pero aunque la compenetración entre Rivero y el Abuelito fue buena, los dos galgos fugados habían ya creado un buen hueco que hacia estéril el intento de atraparlos.

A la entrada de Las Palmas estaban los fugados esperándonos,  nos reunimos y nos deseamos lo mejor, había terminado un buen día de pedales y de ciclismo, de salida de compañeros con buen ambiente.

Compañeros fue un placer ir a vuestra rueda y compartir este bello día,  me alegro de haber salido con vosotros, os doy gracias desde aquí por la buena acogida que me brindasteis.

Espero volver a veros pronto en la carretera.