domingo, 2 de septiembre de 2012

Crónica de la salida del 1 septiembre 2012

A la salida de hoy acudimos mas integrantes de los que yo en principio pensaba: Ricardo, Santi, Germán, Domingo, Juanfran, Marcos, Rafa, Sergio, Ernesto, y el Abuelito, y mas tarde se nos unió Ñito.
 La salida era dura pues la distancia era considerable  y cerca del final habría subidas y el viento castigaría nuestras cuerpos en todo el regreso. Esto lo sabíamos todos, pero empezamos a hacer desde el principio algunas cosas mal.
Marcos, Santi, Ernesto, Domingo, Rafa, El Abuelito,German y agachado El presidente Ricardo. El autor de la foto Frank el lugarteniente.

 Algunos pensaron que cambiarían el itinerario haciéndolo mas fácil o corto.
 Otros se olvidaban que dentro de la filosofía de Club Avispero, el grupo es mas importante que las individualidades y se  olvidaron de esta cuestión y la salida la hicimos actuando con poca técnica de grupo pues, cuando entrabamos en la cabeza de un relevo subíamos 3 o 4 kilómetros/hora el ritmo que se llevaba, ocasionando con frecuencia una escapada. Otras veces la grupeta se partía porque uno de los integrantes de la mitad de grupeta bebía agua ... y su escasa técnica le hacia bajar el ritmo o agrandar su margen de seguridad y darle mas distancia al ciclista que le precedía y después de haber terminado de beber, el viento era tan fuerte y sus fuerzas tan limitadas que no podía coger rueda. Tampoco los compañeros de atrás estaban atentos al corte y no le sobrepasaban para impedir que el corte existiera.

En nuestra grupeta hay ciclistas con un gran nivel individual, y entre unos pocos pueden asumir sin problemas  luchar contra el viento sin que mas gente de la grupeta intervengan en ellos. Yo hoy me ofrecí a Ricardo y a Santi, que si querían contar conmigo en algún momento podría  ayudar (me encontraba bien). Entiendo que tomaron nota de mi ofrecimiento. En el cruce de Vecindario con dirección a Juan Grande vi que Santi estaba un poco despistado y le salían dudas por donde coger y me puse delante  para facilitarle la decisión  y una vez en la cabeza, intenté llevar una velocidad apropiada para la distancia que debíamos de hacer ( en principio calculamos 130 km) y siempre intenté pensar en el "mas debil", haciéndome la pregunta: ¿este ritmo que pongo es adecuado para que pueda hacer la distancia total el mas débil.?.... en función de la repuesta bajo o subo el ritmo. También estaba esperando que Santi volviera a coger la cabeza y siguiera haciendo de tren de la grupeta cuando vi que salían dos compañeros a  6 kilómetros/hora más de la velocidad que llevábamos y saqué mi mano derecha pidiendo calma al resto de la grupeta para que no se contagiaran y esta salida provocara un desmadre y todos nos metiéramos en una batalla sin sentido. Pronto Domingo cogió la grupeta y Santi a su rueda volvieron a liderar la grupeta hasta integrar a los fugados  al pelotón.
 Estas salidas igual que los relevos no solicitados, hacen que la grupeta incremente el ritmo y estos cambios de ritmo son la peor "medicina" que podemos mandarle a nuestras habituales escasas fuerzas, haciendo que vayamos acumulando esfuerzos y terminemos machacados a falta de 15 kilómetros para llegar a casa.
 Hoy el pelotón dio muchas muestras de faltas de entendimiento, falta de técnica colectiva, y por desgracia todo esto nos llevó a pensar individualmente,en lugar de pensar  en que somos miembro de un grupo y los menos preparados nos necesitan.
 Algunos intentaron llevar al grupo y defenderlo contra el viento, pero si mirabas para atrás, había demasiados ciclistas que no cogían rueda y por lo tanto no se beneficiaban apenas del rebufo, esto desmotivaba a los que hacían de cabeza de trenes pues veían que su esfuerzo y su trabajo no serviría para nada....
 Después de dos pinchazos y viendo que la organizacion del grupo era bastante mala, se prefirio acortar la etapa dándonos la vuelta en la rotonda del Karting de San Agustín  cogiendo otra vez Las Palmas pasando por Vecindario y repostando agua pues el calor apretaba de lo lindo y emprendiendo la ruta de regreso viendo como alguno se comía un tremendo "bocadillo" de cuatro pisos, que yo no quise mirar que contenía pues en este mismo momento di "por muerto" al devorador de suculento manjar, y tampoco tenia ganas de explicarle que lo que estaba haciendo limitaría en 20 minutos sus prestaciones físicas, era casi un suicidio lo que estaba haciendo pero......doctores tiene la iglesia.
  Algunos llevábamos geles y barritas energéticas para hacer reposiciones de carbohidratos, los cuales en la subida a el Goro con viento fuerte a mas de uno nos hizo falta, pues llegar a cuatro puertas con 90 kilómetros en las piernas, castigados por el viento y el calor agobiante no es tarea fácil.
 El calor hizo que en ruta me tomara 6 bidones de liquido, 1 Cocacola, 1 Acuario. mientras que 1 barrita, dos pastelillos de "carne de membrillo" (preparado comercial de carbohidratos) y 2 geles de 40 gramos hicieron el trabajo para no dejarme desfallecer.
Al final 117 kms y 1100 mts de desnivel.......... y el viento y el calor y 24,5 Km/hora de media

 En la cuesta de Ramón la grupeta se desintegró debido a la falta de motivación de unos, el cansancio de otros y el mal rollo que se respiraba en el ambiente, pues la mayoría estábamos convencidos de que la salida no habia cumplido las expectativas y había sacado nuevamente los vicios y defectos que tiene el grupo, haciendo que este se rompiera y la desmoralización penetrara en muchos de los miembros.
Haciendo autocritica diría que los fallos son los siguientes:
    1º Todos los que salimos tenemos que hacer el mismo trayecto, no debemos de acortarlos a nuestras necesidades personales.
    2º Tiene que haber un responsable o "capitán" de la salida y éste deberá buscar a a los ayudantes que considere y les dirá lo que espera de ellos y el trabajo que quiere hacer.
    3º El resto tenemos que ir a rueda y estar atentos por si hubiera un corte impedirlo.
    4º Tenemos que estar atentos por si alguien se queda para avisar que relentizen el ritmo o que alguien designado por el "capitán de la salida" vaya a socorrerlo.
    5º Si es posible pedir que relentizen el ritmo si vemos que es demasiado fuerte para nuestras posibilidades.
    6º Tenemos que comer y beber en función del kilometraje de la etapa para impedir que nos vengan las conocidas "pájaras".
    Si no llevamos estas reglas nos convertiremos en un club mas, y perderemos la identidad que queremos para el colectivo. Todos queremos mejorar, ¿para que? ....¿para competir unos con otros?.....
 ¿ El club que queremos es un lugar que nos reunimos para salir y cinco minutos después de hacerlo podemos ir desperdigados de tres en tres? ......¿eso es lo que queremos?.
Hoy al pasar el túnel de la Laja, no han cerrado el carril como nos tienen acostumbrados, pero es que nosotros tampoco fuimos totalmente agrupados, ....pero señores es nuestra seguridad la que ponemos en juego,...sabemos que al ir en grupo es mas fácil que los coches nos vean. ¿como es que no lo hacemos y mas en un lugar como un túnel?. Debemos de reflexionar hacia donde queremos ir y hacer una valoración seria de nuestros actos.
 Podemos ser un grupo que nos haga sentir muchas satisfacciones o un grupo que nos haga sentirnos desgraciados, y esto está en nuestras manos, es una decisión nuestra que tenemos que tomar y después trabajar mucho para poder conseguir los resultados propuestos.



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